Considero que las diferentes pautas
motoras que asume el humillador se descubren cuando su actitud se
aplica sobre un individuo de manera transparente o pura —sin
emociones de por medio—, o sobre un opositor a sus ideas que es
considerado como un enemigo real y mortal.
Puedo acertar al descubrir que humillar es destacar las
particularidades ajenas inferiores a las mías, ya sean culturales
como materiales, dejando claro que mi superioridad intelectual me coloca...
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